Según el diario israelí, Haaretz, el canciller australiano, durante una conversación telefónica con su homólogo israelí, Avigdor Lieberman, reiteró que Australia se opone a cualquier ataque del régimen israelí contra las instalaciones nucleares de Irán.
Carr también ha advertido a Lieberman de que "un ataque israelí contra las instalaciones nucleares de Irán tendrá graves consecuencias".
“Más y más países occidentales se unen a la creciente lista de estados que están aplicando una fuerte presión internacional sobre Israel para evitar que ataque las instalaciones nucleares de Irán. La última voz es la del nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Australia, Bob Carr,”, publicó el rotativo.
EE.UU. y la Unión Europea (UE) han impuesto fuertes sanciones a Irán bajo el pretexto de que el programa nuclear iraní esconde dimensiones militares, mientras que el régimen israelí, que cuenta con más de 200 cabezas nucleares, amenaza con atacar al país persa.
En reiteradas ocasiones, las autoridades iraníes han anunciado que Irán no dispone de armas nucleares y tampoco piensa construirlas, sin embargo, ha asegurado que si algún país osa atentar contra su soberanía no se quedará de brazos cruzados y se defenderá de cualquier agresión. Asimismo, han advertido de que cualquier medida militar contra la República Islámica de Irán desencadenaría una guerra que se extendería más allá del Oriente Medio.
Irán, como miembro de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y signatario del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), siempre ha realizado sus actividades nucleares bajo las normas del organismo.
FUENTE: http://www.hispantv.com/detail.aspx?id=177598
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